domingo, diciembre 18
El jardín está completo con dos reposeras blancas casi nuevas y los copetes recién plantados. Por detrás se esconden unas gazañas que fueron cambiadas de lugar y poco a poco pierden su luz. Y con la pava y el mate me place sentarme en el pasto, hundir los dedos de los pies entre la hierba, cerrar los ojos, y respirar desde el alma.
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario