BITE ME, si te atreves.

yo hice mal las cosas... yo hice mal las cosas... yo hice mal las cosas... yo hice mal las cosas...

YO HICE MAL LAS COSAS?

Es un cuento de nunca acabar...

Siempre me la agarro con el pelo. Vá, depende el tipo de crisis.

Hay que aceptarlo, solos nacimos, y solos moriremos...

Pero mientras tanto seremos felices
por y para nosotros mismos.

Haceme como querés...

O quereme como me hacés.

No soy perfecta, me cuesta ordenar, me cuesta ordenarme... Tener en claro qué vá primero, qué vá después, las prioridades nunca fueron mi fuerte. Pero si sé que nunca me olvido de nadie, puede que a lo mejor no lo demuestre con palabras, o puede que sí y eso no alcance, puede que me pierda cosas, puede que me pierda entre cosas. Pero el sentimiento no lo pierdo, todos quedan: amistad, amor, cariño, respeto, desilusión a veces. Todo queda, todo cuenta, siempre me acuerdo, siempre. No creas que me olvido, que no lo tengo en cuenta, siempre me acuerdo, siempre.

Extrañarse es el secreto.

Si mi cuarto es un desastre, no te atrevas a preguntar cómo están ordenadas mis neuronas.

Pierdo el celular 50 veces por día, será que pierdo la cabeza 100 veces más...

Huye hacia los bosques,
Vete a la montaña;
Límpiate la boca;
Vive en las cabañas;
Toca con las manos
La tierra mojada;
Alimenta el cuerpo
Con raíz amarga;
Bebe de las rocas;
Duerme sobre escarcha;
Renueva tejidos
Con salitre y agua;
Habla con los pájaros
Y lévate al alba.
Y cuando las carnes
Te sean tornadas,
Y cuando hayas puesto
En ellas el alma
Que por las alcobas
Se quedó enredada,
Entonces, buen hombre,
Preténdeme blanca,
Preténdeme nívea,
Preténdeme casta...

Storni, Alfonsina.

Solo entonces preténdeme algo.