Nada tiene sentido, perdio valor, significado, no sé para qué estoy viviendo. No entiendo de qué me sirve levantarme a la mañana, desayunar, almorzar, cenar. Llego a la noche sin ganas de dormir, porque es el resultado de otro día más sin sentido, perdido, siento que se me está yendo la vida y no tengo ninguna emoción que la compense. Tengo varias voces en mi cabeza, todas distintas, ninguna con algo claro qué decir, solamente rellenan el silencio que me rodea, y no me dejan dormir. Trato de agarrar fuerte esos momentos diminutos donde pareciera que algo está bien, y de un segundo al otro los pierdo, se me escapan como todo lo que alguna vez me hizo feliz. Pienso que no tengo ganas de vivir y solo sigo porque lastimaria mucha gente si no lo intento. Y hago fuerza, una fuerza increible cada vez que planeo algo y llega el momento donde no quiero cumplirlo, no tengo ganas, pero sigo y lo intento, trato de no llamar la atencion, ya no me consuela que alguien se preocupe, estoy buscando una respuesta que nadie tiene. Tengo que rendir ese examen, porque es la unica meta seria que me queda, y vuelvo a hacer una fuerza increible para salir de la cama, agarrar los apuntes y presentarme. Porque hay muchas veces donde me doy el gusto de no cumplir, ni con la vida, ni con la gente, porque quiero sentirme mal y ya, porque me lo merezco, porque me la pase toda la vida cumpliendo expectativas ajenas y ahora sencillamente no quiero más. Pero si no rindo los examenes, despues viene la culpa, porque soy poco, porque no lucho, porque me quedo. Y qué dice eso de mí, que estoy cayendo cada vez más abajo, que asi voy a terminar mal, o peor. Y que estoy dejando pasar el tiempo, un tiempo que no vuelve, que ya estoy grande y no se quien soy, no sé que quiero, ni sé para qué sirve todo esto.
martes, diciembre 18
viernes, noviembre 30
Vacio perfecto
Voy sanando y empiezo a ver las cosas con más claridad. Como este pibe se pensó que estaba perdiendo otras cosas por estar conmigo, y freno, y pienso que nunca vió todo lo que perdió en todo ese tiempo sin arriesgar nada. El llenaba sus espacios con tecnologia, cuando se aburria de la play, se compraba una consola, cuando la consola quedaba un cajón, se compraba una tele más grande y que loco, porque la tecnología a ese nivel de consumo solamente te aleja de pensar, de ser, de estar.
Igual que vivir siempre esperando que pase algo más, la cadena perfecta de vacío
Igual que vivir siempre esperando que pase algo más, la cadena perfecta de vacío
domingo, noviembre 25
Dar de nuevo
Me siento muy alejada de mi, de esa Lore que abrazaba cada noche su corazón y salia a la vida con una sonrisa. Se que debe estar en algún lado pero hace mucho que no la veo, hace mucho que no me siento yo, y es agotador. Cuando digo hace mucho me refiero a que la ultima vez que lo recuerdo, fué antes de estar en pareja, hace ya unos dos años, y ahora, que volví a dormir mal, que vuelvo a enroscarme de noche con mis músculos agarrotados, me pregunto con ganas dónde estoy. Donde habré ido a parar en tanto tiempo, dos años vagando por ahi estuvo esa Lore, perdida, que ya no quiere vagar más, que se cansó de no verse en el espejo, de no reconocerse. Y tengo que decirle chau a muchas cosas que armé con tanto esfuerzo, y tan poca claridad. Todo a tientas, todo masomenos así, para que funcione, que ande, que no se caiga, que algo sostenga otro algo. Y claro, me sacaron una ficha y se me cayó toda la estantería.
Porque puedo
Esta semana fui a trabajar al resto ese, apenas se acercó la hora empecé a ponerme de mal humor, nerviosa al punto de irritabilidad. Pienso, esto no lo quiero. Después llego, veo que hay un poco de miedo al desafio, al no saber hacer las cosas, a los ojos juzgantes y digo bueno, quizás es idea mia. Me preguntan si voy la semana que viene, dos dias? Bueno dale, y llego a casa y pienso otra vez que no me gusta nada, que para qué acepté, que mejor mañana voy en busca de algo de distinto. Y bueno, cumplo mi palabra, trabajo, me llevo la plata, y sigo buscando algo que no me mueva tanto los fantasmas. Porque puedo elegir.
Esta vez sí
Dormir contigo es estar solo dos veces, dice una cancion que me mueve todo, y creo a ciencia cierta en sus palabras. Hay personas, que por no darse, por no involucrarse, pueden hacernos sentir solos en su intima compañía, como trabajo de hormiga, sigiloso y eficaz. Asi hiciste vos conmigo, que no supiste verme ni escucharme, que nunca cediste solo por hacerme sonreir, y que, dudo, realmente sepas de qué va el amor.
No te guardo rencor, pero esta vez, sí, siento el tiempo perdido.
domingo, octubre 7
Nos dejamos
Che, que le pasa a Lore? Nada, la dejó el novio. Uh, garrón.
No me dejó mi novio, se fué la persona que amaba, de un momento para otro, sin aviso. Se fueron con el un millon de mis besos, abrazos, un millon de momentos, ilusiones. Y a mi me quedo esto, algunas fotos medio mentirosas, unos ojos hinchados como sapo en verano, y un par de remeras que todavia tienen su olor. Quedó tambien mi perro preguntando si es él cada vez que escucha la reja, quedaron mis ahijados, que lloran conmigo cuando digo que a veces la gente deja de querer.
No me dejó mi novio, se fué la persona que amaba, de un momento para otro, sin aviso. Se fueron con el un millon de mis besos, abrazos, un millon de momentos, ilusiones. Y a mi me quedo esto, algunas fotos medio mentirosas, unos ojos hinchados como sapo en verano, y un par de remeras que todavia tienen su olor. Quedó tambien mi perro preguntando si es él cada vez que escucha la reja, quedaron mis ahijados, que lloran conmigo cuando digo que a veces la gente deja de querer.
No me dejó mi novio, nos dejamos, los dos, llorando fuerte y abrazados, porque no hay nada más feo que desear querer a alguien, y no poder.
Etiquetas:
Crisis
,
Espero curarme de ti
,
Personal
,
Wilde
lunes, febrero 26
El camino que elegí
Un dia tuve la suerte mirarme al espejo y encontrarme, saber quien era, qué queria, y como quería vivir mi vida. Ese mismo dia lloré, un poco de felicidad, un poco por melancolía. Y comencé el camino más largo, el de aprender a ponerme primero, para poder dar siempre lo mejor de mí a quien tuviera en frente. En ese camino algunas personas tuvieron que quedar atrás, porque en cada paso el caminar era distinto, y ya no podíamos ir al mismo ritmo. Varios años después, todavía hoy, lo transito y les aseguro que de fácil nada tiene, hay golpes, incertidumbre, piedras, y algún que otro desvío. Pero con el tiempo se me unió un montón de gente que camina a la par, que me alienta cuando estoy cansada, y con la que solo por charlar el camino se disfruta.
Y al final del día, cuando pienso en el destino,
creo que ya no me importa más a donde voy,
sino lo importante que es caminar así.
Y al final del día, cuando pienso en el destino,
creo que ya no me importa más a donde voy,
sino lo importante que es caminar así.
Suscribirse a:
Entradas
(
Atom
)